A F. H.


(EN SU ALBUM)



Dime, por tu blanca frente
¿no pasa á veces doncella
una idea pura y bella
que inunda de luz tu mente.

Una idea que parece
el primer albor del día,
cuando tras noche sombría
rosado el cielo amanece?

Idea grandiosa y noble
que da á nuestro sér vigor,
como da sombra á una flor
la hojosa rama del roble.

Idea que arde en mi pecho
como en un templo arde un cirio,
y ansioso anhelar me ha hecho
por la palma del martirio.

Ah, sí! sentirla tú debes
pasar por tu frente pura
bajo una bella figura
que á pintarnos no te atreves.

Sí, porque las tristes almas
nacidas bajo este cielo
á Dios levantan sus palmas
y Dios les da ese consuelo.

Guarda esa unción que te envía,
bendícela eternamente:
si fueres madre algún día
ella á tu infante alimente;

y aunque la odiosa maldad
arrancártela quisiera,
antes mueras tú que muera
tu idea de Libertad!

     Matanzas.-1846.

 


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