¡Solo!
Nada más que estar solo es lo que quiero
con mi pena infinita¡
solo, como el fatídico sendero
por dó nadie transita.
Solo, con mi pesar y mi conciencia¡
como un árbol sombrío,
como el águila herida en la eminencia,
como un templo vacío ......
Solo, como en el éter esplendente
el sol, que apenas arde,
cuando, como una virgen inocente,
va muriendo la tarde ......
Está solo el perfume en la corola,
el llanto en la pestaña¡
la peña, allá en el mar, se encuentra sola,
y el hielo en la montaña.
La espuma, sola está sobre los mares,
en las tapias, la yedra,
la imagen celestial, en los altares.
y en las ruinas. la piedra!
No existe un bien mayor que el aislamiento:
el que no se recluye.
teniendo que exhibir su pensamiento
lo enloda y prostituye;
Hoy considero mi mejor amigo
al que de mí se aleja,
al que viendo el camino que yo sigo
me abandona y me deja ......
Viviendo triste, pensativo y solo
quédame una alegría;
la de impedir que la maldad y el dolo
busquen mi compañía.
Oculto en los humanos corazones
se halla siempre un verdugo,
queriendo de sus míseras pasiones
imponernos el yugo.
Anhelo solo estar, como las cumbres
erguidas y altaneras,
lejos de las compactas muchedumbres
que rugen como fieras.
¡Lejos de la soberbia y la perfidia,
lejos de los tumultos,
lejos de los zarpazos de la envidia,
lejos de los insultos!
Solo, con mi dolor y con mi pena,
muriéndome de hastío,
inmóvil quiero estar, como en la arena
el náufrago navío.
Mas si vivir me deja esta agonía
que mi espíritu abate,
lo que yo valga, he de probarlo un día.
en medio del combate!
1898.
|